14.5.2025
Marketing Digital
Cómo evitar los errores más comunes al usar inteligencia artificial en el trabajo

La IA llegó para quedarse… pero ¿la estamos usando bien en el trabajo?

La inteligencia artificial dejó de ser una promesa futurista para convertirse en una herramienta cotidiana. Hoy, la IA está presente en informes, propuestas, análisis de datos, contenidos y hasta presentaciones internas. En pocas palabras, está hasta en la sopa.

Pero, como todo recurso poderoso, mal usado puede ser un riesgo. Un estudio reciente de la Universidad de Melbourne reveló que casi la mitad de los trabajadores usan la IA de forma inapropiada, y más preocupante aún: la mayoría lo hace sin saber si está bien o mal.

Desde DT Comunicación, donde integramos herramientas de IA para optimizar procesos de marketing, branding y contenidos, creemos que es momento de hacer una pausa y reflexionar: ¿estamos usando la IA de forma estratégica y ética?

IA en el trabajo: uso masivo, formación escasa

Según el estudio, el 58% de los trabajadores ya utiliza IA para sus tareas laborales y un 33% lo hace de forma diaria o semanal. El entusiasmo es lógico:

  • El 67% dice ser más productivo.
  • El 61% accede a mejor información.
  • El 59% asegura que la IA mejora la innovación.
  • El 58% percibe mejoras en la calidad de su trabajo.

Pero detrás de estos números alentadores, hay una verdad incómoda: el 66% confía en las respuestas de la IA sin verificar su veracidad, y un 56% ha cometido errores por confiar ciegamente en las herramientas.

¿Por qué se usa mal la IA en el trabajo?

Falta de políticas claras

Solo el 34% de las empresas tiene normas explícitas sobre cómo utilizar herramientas de IA. Y en el 66% de los casos, los empleados usan IA sin saber si está permitido. Esto deja todo en manos del criterio individual... lo que rara vez termina bien.

Desconocimiento técnico y legal

Muchos empleados (el 48%) comparten información sensible con plataformas públicas como ChatGPT, sin saber los riesgos que esto implica para la confidencialidad, los datos personales o la propiedad intelectual.

Presión por “no quedarse atrás”

Más del 50% de los trabajadores siente que si no usan IA, corren el riesgo de ser reemplazados o quedar obsoletos. Esa presión los lleva a priorizar la velocidad por sobre la calidad y la ética.

Falta de formación estructurada

Apenas el 47% de los empleados recibió algún tipo de capacitación en el uso de IA. Es decir, la mayoría se maneja por intuición, prueba y error.

¿Qué pueden hacer las empresas para revertir este escenario?

Desde nuestro lugar como expertos en marketing digital y tecnología, proponemos algunas acciones concretas:

1. Crear políticas internas claras y accesibles

Las reglas deben estar por escrito, ser de fácil acceso y contemplar:

  • Qué herramientas están aprobadas.
  • Qué tipo de información se puede procesar con IA.
  • Cómo citar o declarar contenido generado con IA.
  • Qué prácticas están prohibidas.

2. Capacitar al equipo

Una cosa es saber que existe ChatGPT. Otra muy distinta es usar prompts efectivos, validar fuentes, detectar sesgos o prevenir errores de interpretación. Las empresas que forman a sus equipos sacan ventaja no solo en eficiencia, sino en reputación y seguridad.

3. Promover una cultura de transparencia

Si un colaborador usó IA para escribir un informe, generar una imagen o redactar una propuesta, debe poder decirlo sin temor a ser juzgado. Esto ayuda a identificar errores, mejorar procesos y construir una cultura ética.

Hacia un uso estratégico y humanizado de la IA

La IA no reemplaza a las personas. Las potencia. Pero solo si se la utiliza con criterio, propósito y ética.

No se trata de demonizar la tecnología, sino de aprender a integrarla inteligentemente. Una IA mal usada puede generar desde errores técnicos hasta problemas legales. Pero una IA bien gestionada puede:
✔ Automatizar procesos repetitivos.
✔ Aportar insights valiosos.
✔ Aumentar la productividad real.
✔ Mejorar la experiencia del cliente.

Conclusión: más IA no es mejor IA

El uso masivo de herramientas de inteligencia artificial en entornos laborales es una oportunidad gigante, pero también un riesgo si se gestiona mal.

💡 La clave no es solo usar IA. Es usarla bien. Con políticas claras, formación constante y una cultura de transparencia, tu empresa puede liderar este cambio en lugar de quedar atrapada en sus errores.

📌 En DT Comunicación, ayudamos a equipos y marcas a integrar la tecnología de forma estratégica y creativa. Si querés más contenidos como este, visitá nuestro blog o enterate de lo último en innovación digital en nuestra sección de noticias.

🚀 La IA es poderosa. Pero lo verdaderamente inteligente es saber cuándo y cómo usarla.