Pepsi, siempre al acecho de la oportunidad para ganar terreno frente a Coca-Cola, ha lanzado una ingeniosa campaña de verano que parodia la icónica campaña de su competidor, “Comparte una Coca-Cola”. Mientras Coca-Cola revivió esta campaña para atraer a la Generación Z, Pepsi le da su propio giro, enfocándose en las combinaciones de comida que mejor acompañan su refresco.
A partir de este verano, los consumidores podrán encontrar botellas de Pepsi con nombres de alimentos en lugar de los tradicionales nombres personales. En lugar de ver nombres como “Tom” o “Paige”, los nuevos envases incluirán términos como “Hamburguesas” y “Alitas”. La marca busca resaltar el hecho de que Pepsi es el acompañante perfecto para los alimentos, especialmente durante la temporada de barbacoas y partidos en estadios, donde los refrescos son indispensables.
La campaña está diseñada para llamar la atención de una audiencia más amplia, y se desplegará en varias ciudades de Estados Unidos, incluyendo Nueva York, Los Ángeles, Houston y Dallas. Los anuncios de radio y exteriores refuerzan el mensaje de “La comida merece Pepsi”, mientras que las botellas personalizadas se podrán obtener mediante un sorteo en redes sociales, pidiendo a los usuarios que compartan qué alimentos les gustaría combinar con Pepsi bajo el hashtag #CompartePepsi.
Esta campaña llega justo después de que Coca-Cola decidiera revivir “Comparte una Coca-Cola” para conectar con los consumidores más jóvenes. Aunque la original campaña de Coca-Cola fue un éxito al ofrecer botellas con nombres personalizados, Pepsi argumenta que compartir un refresco con una persona es menos interesante que hacerlo con un delicioso plato de comida. Así, en lugar de enfocarse en amigos y familiares, Pepsi se enfoca en el placer de disfrutar su bebida con los clásicos de la temporada, como hamburguesas, alitas y perritos calientes.
Pepsi ha sabido cómo conectar con la Generación Z, el segmento de consumidores que más busca personalización y autenticidad en las campañas publicitarias. De acuerdo con los datos, la campaña busca resaltar el poder de las combinaciones, brindando una experiencia más atractiva y divertida que la simple unión entre marcas y nombres. Los consumidores podrán ver y compartir sus propias combinaciones de alimentos y refrescos, lo que impulsa la participación en redes sociales.
Pepsi también ha reforzado su presencia en el mercado con anuncios de exterior en ciudades clave, imitando el estilo visual de la campaña de Coca-Cola, pero con un enfoque en la comida. Los usuarios de Pepsi pueden participar en un sorteo para ganar productos exclusivos a través de la plataforma Pepsi Drops y en eventos como la Eeeeatscon de Los Ángeles, que se celebrará a finales de junio.
En cuanto a la promoción de sus bebidas, Pepsi ha vuelto a asociarse con DoorDash para ofrecer descuentos a los consumidores que pidan Pepsi-Cola durante las barbacoas y eventos de verano. Este tipo de colaboración demuestra cómo la marca sigue buscando maneras de llegar a su público de manera innovadora y directa.
Este movimiento se enmarca en una estrategia más amplia de Pepsi para recuperar terreno frente a Coca-Cola, que durante años ha liderado el mercado de bebidas carbonatadas. De hecho, en los últimos tiempos, Pepsi ha visto cómo su cuota de mercado se reducía, especialmente después de ser superada por Sprite, también propiedad de Coca-Cola, y por otras marcas como Dr Pepper.
La respuesta de Pepsi no es solo una parodia divertida de su competencia, sino una estrategia comercial que apela a las emociones de los consumidores y destaca la relevancia de las bebidas en los momentos de disfrute social. Esta campaña subraya cómo la marca continúa evolucionando, adaptándose a los cambios en las preferencias de los consumidores y aprovechando las oportunidades para generar conversación, incluso a través de la parodia.
La campaña de Pepsi es un claro ejemplo de cómo una marca puede tomar una idea icónica de la competencia y convertirla en una oportunidad de diferenciación. A través de una combinación de humor, personalización y enfoque en la comida, Pepsi no solo se burla de Coca-Cola, sino que también crea una conversación valiosa en torno a la combinación perfecta de alimentos y bebidas.
Si bien la batalla por el dominio del mercado de refrescos sigue siendo feroz, Pepsi está demostrando cómo la creatividad y la innovación pueden marcar la diferencia, no solo en el contenido de las campañas, sino también en la manera en que las marcas se conectan con su público objetivo.